La ciencia.
58. —La inteligencia humana ha elevado sus potentes concepciones por encima de los límites del espacio y del tiempo; ha penetrado en el dominio inaccesible de las antiguas edades, sondeado el misterio de los cielos y explicado el enigma de la creación. El mundo exterior ha desplegado, a los ojos de la ciencia, su panorama expléndido y su magnífica opulencia; y los estudios del hombre le han elevado al conocimiento de lo verdadero: ha explorado el universo, encontrando la expresión de las leyes que lo rigen y la aplicación de las fuerzas que lo sostienen, y, sino ha sido dado a este mirar "facie ad faciem", cara a cara, a la causa primera, por lo menos ha llegado a la noción matemática de la serie de las cosas secundarias. En este último siglo, el método experimental, —único verdaderamente científico, —se ha aplicado a las ciencias naturales, y con su auxilio se ha ido el hombre emancipando de las preocupaciones de la antigua escuela y de las teorías expeculativas, para encerrarse en el campo de la observación, y cultivarlo con cuidado e inteligencia. Sí, la ciencia del hombre es sólida y fecunda, dignade nuestros homenajes por su pasado penoso y largamente probado, digna de nuestras simpatías por suporvenir, y preñada de descubrimientos útiles; porque la naturaleza para lo sucesivo es un libro abierto a las investigaciones del hombre estudioso, un mundo franqueado a las meditaciones del hombre pensador, una región brillante, que el espíritu humano ha visitado ya, y en el que puede avanzar con seguridad llevando. por brújula la experiencia.
59. —Un antiguo amigo de mi vida terrestre me hablaba así no hace mucho. Una peregrinación nos había traido a la tierra, y estudiábamos de nuevo moralmente este mundo: mi compañero decía que el hombre está hoy familiarizado con las leyes más abstractas de la Mecánica, de la Física, de la Química: que sus aplicaciones a la industria no son menos notables que las deducciones de la ciencia pura, y que la creación entera, sábiamente estudiada por él, pareceser en lo sucesivo su patrimonio que podría llamarse regio. Y como prosiguiésemos nuestra marcha, ya fuera de este mundo, le respondí en estos términos:
60. —Débil átomo perdido en un punto imperceptible de lo infinito, el hombre ha querido abarcar con sus miradas la extension universal, cuando podía contemplar apenas la región que habita: ha creído estudiar las leyes de la naturaleza entera, cuando sus apreciaciones no habían casi desflorado las fuerzas activas en torno suyo: ha creído determinar la grandeza del cielo, cuando agotaba sus esfuerzos inútilmente para determinar la de un grano de arena. El campo de sus observaciones es tan exiguo, que un hecho perdido de vista, apenas es dado al espíritu poderlo observar de nuevo: el cielo y la tierra del hombre son tan reducidos, que el alma en su vuelo no tiene tiempo de desplegar sus alas antes de haber llegado a los últimos límites accesibles a la observación.
El universo inconmensurable nos rodea por todas partes, desplegando del lado de allá de nuestros cielos, riquezas desconocidas, poniendo en juego fuerzas no presumidas, desarrollando modos de existencia inconcebibles para nosotros, y propagando hasta el infinito los explendores y la vida. Y el arador, mísero ácaro, diminuto insecto privado de a las y de luz, cuya triste existencia pasa en el estrechísimo lóculo que se construye bajo la cutícula de la hoja en que nació, ¿pretendería tener derecho a hablar del árbol inmenso a que pertenece, cuya sombra no ha percibido siquiera, sólo porque ha dado algunos pasos en esa hoja agitada por el viento? Se imaginaría locamente poder hablar razonablemente del bosque del cual forma parte el árbol gigantesco, en una de cuyas innumerables hojas vive oculto, y discurrir sábiamente sobre la naturaleza de todos los vegetales que en el bosque se crian, de los seres que lo habitan, del lejano sol, cuyos rayos descienden alguna voz a llevar a su morada el movimiento y la vida? En verdad que el hombre presumiría demasiado, como el acaro de que hablamos, si quisiera medir la grandeza infinita, por su pequeñez infinita. También conviene que el hombre se penetre bien de esta idea, a saber: que sí los áridos y penosos trabajos de los siglos pasados le han proporcionado la primera noción de las cosas, y sí la progresión del espíritu le ha llevado al vestíbulo del saber, no hace aún más que deletrear la primera página del libro; le sucede lo que al niño, susceptible de engañarse a cada palabra; lejos de querer interpretar magistralmente la obra, debe contentarse con estudiarla humildemente, letra por letra, palabra por palabra, línea por línea. Dichosos aún los que pueden hacerlo!
Nota: *** Ítem 61 – Pasa a ser el ítem 58. Al título de la sección que inicia en el ítem 61 se le cambio el nombre de "Consideraciones Morales" a "Diversidad de los Mundos"
Consideraciones morales.
61. —Nos habeis seguido en nuestras excursiones celestes y habeis visitado en compañía nuestra las regiones inmensas del espacio. Han desfilado bajo nuestra vista soles y soles, sistemas y sistemas, nebulosas y nebulosas: el panorama
expléndido de la armonía del cósmos se ha ido desarrollando ante nuestros pasos, y hemos ensayado la formación de una idea de lo infinito, que no podemos comprender en toda su extensión, sino después de haber adelantado mucho en el camino de nuestra perfectibilidad. Los misterios del éter han revelado su enigma hasta ahora indescifrable y hemos concebido una
imágen áunque descolorida de la universalidad de las cosas. Ahora conviene detenernos y reflexionar.
62, —Bello es sin duda haber reconocido la infinidad de la tierra y su exigua importancia en la jerarquía de los mundos; pero no lo es ménos haber humillado ante la grandeza absoluta la presunción humana y la soberbia a que somos tan inclinados; pero lo es toda
vía mucho más, interpretar bajo su aspecto moral, elespectáculo de que hemos sido testigos. Me refiero a la potencia infinita de la naturaleza y a la idea que debemos formarnos de su modo de acción en las diversas regiones del vasto universo.
63. —Habituados como estamos a juzgar de las cosas por nuestra pobre y pequeña morada, nos figuramos que la naturaleza no ha podido ni debido proceder en otros mundos, de un modo diferente, ni según
otras reglas que las que aquí hemos reconocido. Más en este punto, es precisamente en el que debemos reformar nuestro juicio. Fijad un instante vuestra atención en una región cualquiera de vuestro globo y en cualquiera de lasproducciones de vuestra naturaleza; ¿no reconoceréisel sello de una variedad infinita y la prueba de una actividad sin igual? ¿No reparáis en las alas de un canario, en el pétalo de un capullo de rosa entre abierto, una muestra de la prestigiosa fecundidad de la bella naturaleza? Sea que vuestros estudios recaigan sobrelos seres alados que cruzan los aires, sobre la humildevioleta de los campos, o descienda a las maravillas que se ocultan en las profundidades del Océano; en todo y en todas partes encontraréis la fórmula de esta verdad universal: La naturaleza omnipotente funciona según los lugares, los tiempos y las circunstancias; es una en su armonía general y múltiple en sus producciones; juega con un sol como con una gota de agua; puebla de seres vivientes un mundo inmenso, con la misma facilidad que hace nacer la oruga del óvulo depuesto por la mariposa de otoño.
64. —Pues sí tal es la variedad que la naturaleza ha podido ostentar en todas partes en este mundo tan limitado, ¿cuánto más debeis extender esta cualidad pensando en las perspectivas de los grandes mundos?
¿Y cuánto más podeis ampliar esas ideas y reconocer su inconcebible extensión, aplicándola a esos mundos maravillosos que atestiguan su incomprensible perfección?
No veiaís, pues, en torno de cada uno de los soles del espacio, sistemas parecidos a vuestro sistema planetario; no veiaís sobre estos planetas los tres reinos de la naturaleza que vuestra razón supone en ellos y que se observan en el vuestro; más pensad, que así como no hay rostro ni carácter idéntico en un todo, entre los individuos de la especie humana, del mismo modo una diversidad prodigiosa, inconcebible, reina en esas mansiones etéreas. Porque nuestra naturaleza animada comience en el zoófito para terminar en el hombre; porque la atmósfera alimente mediata e inmediatamente la vida terrestre; porque el elemento líquido la renueve sin cesar, y las estaciones hagan sucederse en esta vida los fenómenos que la caracterizan; no vayaís a figuraros que los millones de millones de tierras que flotan en el espacio sean parecidas a la vuestra; lejos de eso, se diferencian según las condiciones
diversas que les han sido departidas, y según su papel respectivo en la escena del mundo. Son las diminutas piedras de un inmenso mosáico, las flores várias de un
jardín interminable.
______________________________
En el mismo capítulo VI, de Génesis Espiritista, ítems #20, #21, #23,
LOS SOLES Y LOS PLANETAS.
20. —Mas acontecía que en un punto del universo
perdido entre millares de mundos, se condensó la materia cósmica bajo la forma de una inmensa nebulosa;
la cual estaba animada por las leyes universales que
rigen a la materia. En virtud de estas leyes y principalmente de la fuerza molecular de atraccion, revistió la forma de un esferoide , única que puede afectar
primitivamente una masa aislada en el espacio. El movimiento circular producido por la gravitación exactamente igual de todas las zonas moleculares hácia el centro, modificó bien pronto la esfera primitiva para transformarla, de movimiento en movimiento, en figura lenticular. —Hablamos del conjunto de la nebulosa.
21. —Nuevas fuerzas surgieron a consecuencia de
este movimiento de rotacion: la fuerza centrípeta y la
fuerza centrífuga, tendiendo la primera á reunir todas
las partes hácia el centro, y la segunda á alejarlas.
Acelerándose el movimiento á medida que la nebulosa
se condensa y aumentándose su radio á medida que se
aproxima á la forma lenticular, la fuerza centrífuga
incesantemente desarrollada por esas dos causas, pre
dominó muy pronto sobre la atraccion central.
Así como un movimiento demasiado rápido de la
honda rompe la trama y deja escapar el proyectil, del
mismo modo el predominio de la fuerza centrífuga
desprendió el círculo ecuatorial de la nebulosa y de
este anillo formó una nueva masa aislada de la pri
mera, aunque sometida á su imperio. Esta masa con
servó su movimiento ecuatorial, que modificado se hi
zo su movimiento de traslacion en torno del astro so
lar, y además su nuevo estado le da un movimiento
de rotacion en torno de su propio centro.
22. —La nebulosa generadora que dió nacimiento a éste nuevo mundo se condensa y recobra la forma es
férica. Más el calor primitivo producido por sus diversos movimientos no se debilita sino con estremada lentitud, y el fenómeno que acabamos de describir se reproducirá con frecuencia y durante un largo período,
mientras la nebulosa no adquiera la densidad y solidez
necesarios para oponer una resistencia eficaz a las
modificaciones de forma que le imprime sucesivamente su movimiento de rotación.
No habrá, pues, dado nacimiento a un sólo astro,
mas a centenares de mundos desprendidos del foco
central y procedentes de ella del modo ya indicado.
Para cada uno de estos mundos, investido como el
primitivo de las fuerzas naturales que presiden a la
creación de los astros, engendrará luego nuevos globos que gravitarán en lo sucesivo en torno de él, como gravita con sus iguales en torno del foco de su
existencia y de su vida. Cada uno de estos mundos será un sol, centro de un torbellino de planetas escapados sucesivamente de su ecuador, cuyos planetas recibirán una vida especial, particular, aunque dependiente de su astro generador.
23. —Los planetas formados de materia condensada
pero no solidificada, desprendida de la masa central
por la accion de la fuerza centrífuga, toman en virtud
de las leyes del movimiento la forma esferoidal mas ó
menos elíptica, segun el grado de fluidez que han con
servado.
Uno de estos planetas será la Tierra, que antes de
enfriarse y cubrirse de una costra sólida, dará nacimiento a la Luna por el mismo modo de formacion as
tral á que ella debe su existencia; y en lo sucesivo
inscrita en el libro de la vida, dará nacimiento a criaturas cuya debilidad será protegida por las a las de la
Providencia; cuerda nueva del arpa infinita que debe
vibrar en su lugar propia en el concierto universal de
los mundos.
La Vía Láctea
32. —Todos pueden ver durante las bellas noches
estrelladas y sin luna, esa luz blanquecina que cruza
el espacio de una á otra extremidad visible, que los
antiguos llamaron via láctea á causa de su aparien
cia blanquizca ó lechosa. Esa luz difusa ha sido explo
rada durante muchísimo tiempo por el ojo del telesco
pio, y ese camino de polvo de oro, ó ese rio de leche
de la Mitología, se ha transformado en un campo in
conmensurable de maravillas desconocidas. Las inves
tigaciones de los observadores han conducido al con
vencimiento de su naturaleza, y han mostrado, allí
donde la mirada perdida claridad, millones de soles más luminosos y de mayor
importancia queelque nos alumbra.
33. —La via láctea es en efecto una campiña
sembrada de flores solares 6 planetarias que bri
llan en su vasta extension. Nuestro sol y todos los
cuerpos que le acompañan forman parte de esos glo
bos radiantes de que se compone la via-láctea; el cual
á pesar de sus dimensiones gigantescas, comparadas
con las de la tierra, y de la inmensa extension de su
imperio, sólo ocupa un espacio inapreciable en esta
vasta creacion. Pueden contarse una treintena de mi
llones de soles semejantes á él, que gravitan todos en
esta region inmensa, distantes unos de otros más de
cien mil veces,el radio de la órbita terrestre (1 ).
(1) Más de tres trillones y cuatrocientos billones de leguas.
3 9000400 000,000 1 000,000
34. —Puede juzgarse, por este dato aproximado, de
la extension de esta region sideral, y de la relacion
que une nuestro sistema á la universalidad de los sis
temas que la ocupan. Se puede juzgar igualmente de
la exigüidad del dominio solar, y á fortiori, de la na
da de nuestro globo. ¡Qué sería si se cosiderasen los
seres que lo habitan!
Y digo de la nada, porque nuestras determinaciones
se aplican no sólo á la extension material, física, de
los cuerpos que estudiamos,—esto seria poco—sino
que tambien, y muy principalmente, á su estado moral
de habitacion, segun el grado que ocupan en la uni
versal gerarquía de los séres. La creacion se ostenla
ahí en toda su magestad, creando y propagando todo en torno del sistema solar, y en cada nno de los siste
mas que le rodean por todas partes, las manifestacio
nes de la vida y de la inteligencia.
35.—Se conoce de este modo la posicion que ocupa
nuestro sol ó la tierra en el mundo de las estrellas;
cuyas consideraciones adquirirán. mayor peso todavía,
si se reflexiona lo que es la misma via láctea, que en
la inmensidad de las creaciones siderales, no represen
ta, vista desde lejos, sino un punto insensible é inapre
ciable, porque no es otra cosa que una nebulosa este
lar de las que se conocen millares en el espacio. Si
nos parece más extensa y'más rica que otras, es porque
nos rodea y se desenvuelve en toda su extension á
nuestros ojos, mientras que las otras perdidas en las
profundidades insondables del espacio, apenas se dejan
entrever.
36.—Más si se sabe que la tierra es nada ó casi na
da en el sistema solar .y este, nada ó casi nada en la
via láctea; asi como esta nada ó casi nada en la uni
versalidad de las nebulosas, y esta universalidad mis
ma muy poca cosa en el incomprensible infinito, se
comenzará á comprender lo que es el globo terrestre .
Las estrellas fijas.
37. —Las estrellas, que se llaman fijas- y que cons
telan los dos hemisferios del firmamento, no están li
bres de toda atraccion exterior como se supone gene
ralmente. Por el contrario, pertenecen todas á una
misma aglomeracion de astros estelares. Esta aglome
racion no es otra que la gran nebulosa de que forma
mos parte y cuyo plano ecuatorial, que se proyecta en el cielo, ha recibido el nombre de via láctea. Todos
los soles que la componen, son solidarios: sus múltiples
influencias reaccionan perpétuamente entre sí, y la
gravitacion universal las reune á todas en una misma
familia.
38. —La mayor parte de estos soles están como el
nuestro rodeados de mundos secundarios que iluminan
y fecundan por las mismas leyes que presiden á la vida
de nuestro sistema planetario. Unos, como Sirio, son
millones de veces más grandiosos en brillo, extension
y riquezas que el nuestro, y su papel más importante
en el universo, al cual por consecuencia rodean pla
netas más grandes y más numerosos que los nues
tros; otros se diferencian mucho en sus funciones as
trales. Hay cierto número de soles, verdaderos ge
melos del órden sideral, que forman en el espacio sis
temas binarios, á que la naturaleza ha asignado
funciones distintas que las que corresponden á nuestro
sol. Allí los años no se miden ya por los mismos pe
ríodos, ni los dias por los mismos soles, y esos mun
dos iluminados por un doble luminar, han recibido en
dote, condiciones de existencia inconcebibles para los
que no han salido de este pequeño mundo terrestre.
Otros astros sin séquito, privados de planetas, han
recibido los mejores elementos de habitabilidad. Las
leyes de la naturaleza están diversificadas en su in
mensidad, y si la unidad es la gran palabra del uni
verso, la variedad infinita es tambien su atributo sem
piterno.
39. - A pesar del número prodigioso de estas estre
llas y de sus sistemas, sin embargo de las distancias
incomensurables que las separan, no por eso dejan de
pertenecer todas á la misma nebulosa estelar que el
alcance de los más potentes telescopios puede apenas
atravesar, y que las concepciones de la imaginacion
más atrevida pueden apenas^salvar: nebulosa que', sin
embargo, no es más quefuna unidad en el órden de
las nebulosas que componen el mundo astral .
40. —Las estrellas que se llaman fijas no están in
móviles en el espacio. Las constelaciones que se han
figurado en la bóveda del firmamento no son creacio
nes simbólicas reales. La distancia de la tierra y la
perspectiva que desde ella ofrece el universo, son Jas
causas de esta doble ilusion óptica.
41. —Hemos visto que la totalidad de los astros que
centellean en la bóveda azulada, está contenida en
una misma aglomeracion cósmica, en una misma ne
bulosa que llamais la via láctea. Pero no por pertene
cer todos al mismo grupo deja cada uno de estar ani
mado de un movimiento propio de traslacion en el
espacio. El reposo absoluto no existe en ninguna par
te: están regidos por las leyes universales de la gravi
tacion y ruedan en la extension bajo el impulsp ince
sante de esa fuerza inmensa: giran, no siguiendo
caminos trazados por la casualidad, sino órbitas re
gulares cuyo centro está ocupado por un astro supe
rior. Para hacer mis palabras más comprensibles por
un ejemplo, hablaré especialmente de vuestro sol.
42. —Se sabe por las observaciones modernas que
no es fijo ni central, como se creia en los primeros
tiempos de la Astronomía moderna sino que avanza en
el espacio, arrastrando consigo su vasto sistema de
planetas, de satélites y de cometas.
Pero esta marcha no es fortuita, ni va errante por los espacios' infinitos á extraviarse con sus hijos y sus
subditos, lejos ó fuera de las regiones que le están
asignadas. Su órbita está trazada, y con los otros so
les del mismo sistema ú órden á que él pertenece, y
rodeados como él de un cierto número de tierras ha
bitadas, gravita en torno de un sol central. Su movi
miento de gravitacion así como el de los soles, sus
hermanos, es inapreciable á las observaciones anuales,
porque períodos seculares en gran número, bastarían
apenas para marcar el tiempo de estos años siderales.
43. —El sol central de que acabamos de hablar, es
asimismo un globo secundario , comparado con otro
más importante en derredor del cual perpetúa una
marcha lenta y acompasada en compañía de otros so
les del mismo órden.
Podríamos acreditar esta sucesion gerárquica de
soles á soles hasta que nuestra imaginacion resultara
fatigada de recorrer su escala; porque se pueden con
tar en números redondos, no se olvide, una treintena
•le millones de soles en la via láctea , subordinados
unos a, otros como las ruedas gigantescas de un in
menso mecanismo.
44. —Y estos astros sin número viven una vida so
lidaria; porque así como no hay nada aislado en vues
tro pequeño globo, así tampoco se conoce nada inde
pendiente ni aislado en el inconmesurable universo.
Estos sistemas, de sistemas parecerían desde léjosá
la vista escudriñadora del filósofo que supiera abrazar
el conjunto del cuadro que ofrecen el tiempo y el es
pacio, un polvo de perlas de oro levantado en torbelli
nos por el aliento divino, que hace volar los mundos
siderales por los cielos, como los torbellinos de polvo impulsados por el Simoun en los desiertos de Zahara.
Nada de inmovilidad, nada de silencio, nada de oscu
ridad! El gran espectáculo que se desarrollada de esa
suerte a nuestra vista, sería la creacion real, inmensa
y llena de la vida etérea que abraza en su conjunto
interminable la mirada infinita del Criador.
Más en este punto no hemos hablado más que de
una nebulosa: sus millones de soles, sus miles de millo
nes de tierras habitadas, no forman como hemos dicho,
más que una isla en el archipiélago infinito.
Los Desiertos del Espacio
45. Un desierto inmenso y sin límites se extiende más allá de la aglomeración estelar mencionada, rodeándola. Las soledades suceden a las soledades, las planicies inconmensurables de vacío se extienden a lo lejos. Las aglomeraciones de materia cósmica se encuentran aisladas en el espacio, son como las islas flotantes de un inmenso archipiélago. Si se quiere tener una idea de la enorme distancia que separa al conglomerado de estrellas del que formamos parte de los conjuntos más cercanos, es preciso saber que esas islas estelares son escasas y están diseminadas en el vasto océano de los cielos y que la extensión que separa a una de otras es incomparablemente mayor a sus respectivas dimensiones. Más debe recordarse que la nebulosa estelar de
que formamos parte, mide en números redondos mil
veces la distancia de las más próximas estrellas to
mada por unidad, es decir, algunos cien mil trillones de leguas. Pues siendo mucho más vasta que eso la
distancia que separa una de otra nebulosa, no podria
expresarse con números accesibles a la comprension
de nuestro espíritu. Solo la imaginacion en sus más
altas concepciones es capaz de salvar esa inmensidad
prodigiosa, esas soledades mudas, y privadas de toda
apariencia de vida, y de reflejar en cierto modo la idea
de esa infinidad relativa.
46. —Sin embargo, ese desierto celeste que envuel
ve nuestro mundo sideral y que parece extenderse co
mo los confines remotos de nuestro mundo astral, es
abrazado por la vista y el poder infinito del Altísimo,
que más allá de estos cielos de nuestros cielos, ha ex
tendido la trama de su creacion ilimitada.
47. —Del lado de allá de estas vastas soledades, ir
radian en efecto mundos en toda la magnificencia pe
culiar suya, lo mismo que en las regiones accesibles a las investigaciones humanas. Del lado de allá de esos
desiertos, vagan oasis espléndidos en el límpido éter, y
renuevan incesantemente las admirables escenas de la
vida. Allí se desarrollan los agregados lejanos de sus
tancia cósmica, que el ojo profundo del telescopio en
trevé al través de las regiones trasparentes de nuestro
cielo: las nebulosas que vosotros llamais irresolubles,
y que os parecen como lijeras nubes de polvo blanco
perdidas en un punto desconocido del espacio etéreo.
Allí se revelan y se desarrollan mundos nuevos, cuyas
condiciones variadas y extrañas á las que son inheren
tes a vuestro globo, les dan una vida que vuestras
concepciones no pueden imaginar ni vuestros estudios
comprobar. Allí es donde resplandece en toda su mag
nificencia el poder creador; para el que llega de las regiones ocupadas por vuestro sistema, hay otras leyes en acción, cuyas fuerzas rigen las diversas mani
festaciones de la vida; y los caminos nuevos que se
guimos en estos paises estraños, nos ofrecen a cada
paso nuevas perspectivas.
Sucesion eterna de los mundos.
48. —Hemos visto que una sola ley primordial y
general ha sido dada al universo para asegurar su es
tabilidad eterna y que esta ley general es perceptible
á nuestros sentidos por varias acciones particulares
que llamamos fuerzas directivas de la naturaleza. Va
mos á explicar hoy que la armonía del mundo entero,
considerada bajo el doble aspecto de la eternidad y
del espacio, está asegurada por esa misma ley suprema.
49.—En efecto, si remontamos al origen primero
de las primitivas aglomeraciones de sustancia cósmica,
observamos que ya bajo el imperio de esa ley, la ma
teria sufre las transformaciones necesarias que la con
ducen de germen a fruto maduro, y que bajo el impulso
de las fuerzas diversas nacidas de esta ley , recorre la
escala de sus revoluciones periódicas : primero centro
fluidico de los movimientos, luego generador de los
mundos, y más tarde núcleo central y atractivo de la«
esferas que han nacido de su seno.
Sabemos ya que estas leyes presiden a la historia
del Cósmos. Lo que importa saber ahora, es que presi
den igualmente á la destruccion de los astros ; porque
la muerte no es sólo una metamorfosis del ser viviente, sino que tambjen una transformacion de la materia inanimada. Y si puede decirse que es cierto en el
sentido literal de la palabra que sólo la vida es accesible á la segur de la muerte, es justo tambien añadir
que la sustancia debe por necesidad sufrir las transformaciones inherentes a su constitucion.
50. —Hé aquí un mundo que desde su cuna ha re
corrido toda la extension de los años que su organi
zacion especial le permitía recorrer; el foco interior de
su existencia se ha extinguido; sus elementos propios
han perdido su virtud primitiva; los fenómenos de su
naturaleza que requerían para su produccion la pre
sencia y la accion de las fuerzas departidas á este
mundo, no pueden producirse ya, porque esta palanca
de su actividad no tiene ya el punto de apoyo que le
daba toda su fuerza.
¿Se pensará que esta tierra extinguida y sin vida va
á continuar gravitando enlos espacios celestes, sin ob
jeto, y á pasar como'una ceniza inútil en el torbellino
de los cielos? ¿Se creerá que queda inscrita en el libro
de la vida universal, cuando no es ya más que una le
tra muerta y sin sentido? No: las mismas leyes que la
han sacado del caos tenebroso y que la han adornado
con los explendores de la vida; las mismas fuerzas que
la han gobernado durante los siglos de su adolescen
cia, que han sostenido sus primeros pasos en la exis
tencia, y que la han conducido á la edad madura y a la vetustez, van á presidir á la desagregacion de sus
elementos constitutivos para volverlos al laboratorio
de donde la potencia creadora saca sin cesar las con
diciones de la estabilidad general. Esos elementos van
á volver á esa masa comun del éter para asimilarse a otros cuerpos o para regenerar otros soles, y esa muerte no será un acontecimiento inútil á esta tierra
ni á sus hermanas: renovará en otras regiones otras
creaciones de naturaleza diferente, y allí donde siste
mas de mundos han desaparecido, renacerá pronto
un nuevo parterre de flores más brillantes y más per
fectas.
51 . —De este modo la autoridad real y efectiva del
universo queda asegurada por las mismas leyes que di
rigen las operaciones del tiempo ; de este modo los
mundos suceden á los mundos y los soles á los soles,
sin que el inmenso mecanismo de los vastos cielos
pierda en nada la virtud de sus gigantescos resor
tes.
Allí donde vuestros ojos admiran esplendentes es
trellas, allí donde vuestro espíritu contempla irradia
ciones magníficas que brillan en lejanos espacios, ha
ce mucho tiempo que la mano de la muerte ha extin
guido esos explendores, y el vacío ha sucedido á esos
deslumhramientos y aún recibido nuevas creaciones
desconocidas todavía. La inmensa distancia de estos
astros, cuya luz tarda millares de años en recorrerla,
es causa de que recibamos hoy los rayos que nos han
emitido mucho ántes de la creacion de la tierra, y que
los podamos admirar despues de millares de años de
haber desaparecido realmente el foco de que proce
den.
¿Qué son los seis mil años de la humanidad históri
ca, ante los períodos seculares? Segundos en vuestros
siglos. ¿Qué son vuestras observaciones astronómicas
ante el estado absoluto del mundo? La sombra eclipsa
da por el Sol.
52.—Luego, en éste como en nuestros otros estudios, reconozcamos que la tierra y el hombre son nada,
comparados con todos los explendores de la crea
cion, y que las más colosales operaciones de nuestro
pensamiento no se extienden áun sino en un campo
imperceptible, al lado de la inmensidad y de la eterni
dad de un universo que nunca concluirá.
Y cuando estos períodos de nuestra inmortalidad
hayan pasado sobre nuestras cabezas, cuando la his
toria actual de la tierra nos aparezca como una som
bra vaporosa en el fondo de nuestros recuerdos; cuan
do hayamos habitado durante siglos inumerables es
tos diversos grados de nuestra gerarquía cosmológica;
cuando los dominios más lejanos de las edades futuras
hayan sido recorridas por innumerables peregrinacio
nes, todavía tendremos ante nosotros la sucesion ili
mitada de los mundos y la inmóvil eternidad por pers
pectiva.
La vida universal.
53. —Esta inmortalidad de las almas de la cual el
sistema del mundo físico es la base, ha parecido imagi
naria a ciertos pensadores prevenidos; la han califica
do irónicamente de inmortalidad viajera, y no han
comprendido que ella sóla era la verdadera ante el es
pectáculo de la creacion. En tanto, es posible hacer
comprender su verdadera gradeza, y ¿un me atrevo á
decir toda su perfeccion.
54. —Que las obras de Dios están creadas para el
pensamiento y la inteligencia; que los mundos son la
morada de los séres que las contemplan, y que descu
bren bajo su velo el poder y la sabiduría del que los formó; no son cosas dudosas para nosotros. Pero lo
que importa que se sepa es que las almas que los pueblan son solidarias.
55. —La inteligencia humana se resiste, en efecto,
á considerar esos globos radiantes, que centellean en
el espacio inmenso , como simples masas de materia
inerte y sin vida; apenas puede comprender que haya
en esas regiones lejanas magníficos crepúsculos , no
ches explendorosas, dias alumbrados por soles fecundantes; valles, montes y extensas llanuras donde las
producciones múltiples de la naturaleza despliegan su
pomposa vitalidad, y ni aún puede imaginarse que el
espectáculo divino, en que el alma puede empaparse y
saturarse como en su propia vida, pase en medio de la
soledad eterna sin expectadores inteligentes, ni acto
res que lo comprendan , admiren y participen de su
ejecucion, digámoslo así como una gran fiesta sin plan
y sin objeto.
56. —Pero á esta idí-a eminentemente justa de la
creacion, hay que añadir la dela humanidad solida
ria, y en eso consiste el misterio de la eternidad fu
tura.
Una misma familia humana ha sido creada en la uni-
versalidad'de los mundos, y los lazos de una fraterni
dad que áun no podeis apreciar , une la de esos mun
dos. Esos astros, que se armonizan en sus vastos sis
temas, están habitados, no por inteligencias ignoradas
unas de otras y extrañas entre sí, sino criadas para un
mismo fin y marcadas en la frente con un mismo se
llo, que deben encontrarse momentáneamente segun
sus funciones para volverse á buscar y unirse segun
sus mutuas simpatías. Es, en fin, la gran familia de irradiacion del Espíritu divino que abarca la extension
de los cielos y que persiste como tipo primitivo y final
de la perfeccion espiritual.
57.— ¿Por qué extraña aberracion del entendi
miento se ha creido deber rehusar la inmortalidad á
las vastas regiones del éter, cuando se la limitaba y
estrechaba en un límite insignificante y en una duali
dad absoluta? ¿Es que el conocimiento del verdadero
sistema del mundo debia preceder a la verdadera doc
trina dogmática, y la ciencia á la Teología? ¿Está la
Teología condenada áestraviarse mientras no esté ba
sada en la Metafísica? La respuesta es fácil, y nos
muestra que la nueva filosofía se ha de establecer
triunfante sobre las ruinas de la antigua; porque su
base se habrá levantado victoriosa sobre los antiguos
errores.
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Lo que hemos visto en los pasados 5 años en los nuevos descubrimientos de Planetas:
Hemos visto las referencias de Planetas adicionales a los conocidos para ese tiempo y que de ningún modo se podían asegurar que existían, debido a lo anticuado de la tecnología existente en esa época. Veamos la información relacionada al descubrimiento de estos nuevos planetas hoy día.
Nuevos Planetas descubiertos:
Planetas que hasta ahora no habían sido descubiertos
A continuación es la consola para vídeos de ‘Soy Espírita”. Los vídeos que contiene, pueden ser vistos uno detrás del otro en secuencia o al azar según el caso. Usted puede escoger el vídeo que desea ver de los que ya están incluidos o simplemente ver el que esta posicionado. Acuérdese de dar clic en la flecha que apunta hacia abajo en el pequeño recuadro localizado al lado izquierdo en el encabezamiento de la consola. Así hace que la imagen sea agrandada. Es muy fácil.
Nuevos planetas descubiertos,
Los vídeos están actualizados hasta la siguiente fecha:
La Agencia Nacional de Aeronáutica y el Espacio de Estados Unidos (NASA) anunció hoy el hallazgo del primer planeta que orbita en la zona habitable de una estrella similar al Sol, lo que lo convierte en un firme candidato a albergar vida y en primo de la Tierra.
El Kepler-452b fue detectado por el telescopio espacial Kepler, que analiza cambios en la intensidad de la energía emitida por una estrella, considerando frecuencia y reducción de luminosidad, para confirmar la existencia de planetas. Jon Jenkins, jefe de análisis de datos de la misión Kepler, explicó en rueda de prensa que el planeta es un 60% más grande que la Tierra, por lo que la gravedad en su superficie sería dos veces la del nuestro.
No obstante, su tamaño permite a los científicos adelantar que el planeta es rocoso, probablemente con una atmósfera más densa y con una importante concentración de volcanes activos. El planeta recibe un 10% más energía de su estrella que la Tierra, ya que el astro está en un estadio más avanzado de su vida, por lo que emite más brillo y es más grande.
La NASA lo ha calificado como "un primo, más grande y más viejo, de la Tierra". "Este es hasta ahora el planeta que más se asemeja a la Tierra y algo que podemos llamar hogar", explicó uno de los científicos del programa. La órbita alrededor de su estrella es bastante similar a la de la Tierra, ya que el Kepler-452b completa su año en 385 días. No obstante, el "primo" de la Tierra se encuentra a 1.400 años luz.
La NASA considera como la zona habitable de un sistema solar la franja en la que la temperatura permitiría la existencia de agua en estado líquido en un planeta. Hasta el momento, el más prometedor hallazgo de un planeta parecido a la Tierra era el Kepler-186f, con un tamaño muy parecido a nuestro planeta, pero que órbita alrededor de una estrella enana, mucho menos cálida que el Sol.
http://cnnespanol.cnn.com/2014/04/17/la-nasa-descubre-un-planeta-del-tamano-de-la-tierra-que-podria-albergar-vida/
17 abril 2014
07:50 PM ET
Por Josh Levs, CNN
(CNN) – Es como encontrar una aguja en un pajar universal. Investigadores han localizado un planeta del tamaño de la Tierra que podría ser habitable.
Nombrado Kepler-186f, el planeta está a 490 años-luz de distancia. Pero en la búsqeda de mundos similares al nuestro, nada ha estado tan cerca.
“Este es el primer definitivo planeta con tamaño similar a la Tierra que ha sido hallado en una zona habitable alrededor de otra estrella”, dijo Elisa Quintana, del Instituto de Búsqueda de Inteligencia Extraterrestre (SETI, por sus siglas en inglés) de la NASA. “Encontrar ese tipo de planetas es un objetivo primordial del telescopio espacial Kepler”.
“Ese descubrimiento no solo prueba la existencia de mundos que pueden ser similares al nuestro pero sin duda moldea las futuras investigaciones de exoplanetas que podrían tener ambientes de superficie terrestre”, dijo el instituto en un anuncio el martes.
Después de detectarlo, el instituto no escatimó tiempo en buscar emisiones que puedan indicar la presencia de vida extraterrestre. Hasta ahora, no han hallado ninguna.
El tamaño no sólo es un dato interesante. Es un factor que les da a los científicos la esperanza que Kepler-186f podría albergar vida como la conocemos.
De los casi 1.800 “exoplanetas confirmados”, aproximadamente 20 orbitan a sus estrellas en zonas habitables, el especio en el que se cree que el agua de la superficie no se congela ni si hierbe.
En 2011, la NASA anunció que el telescopio Kepler observó cinco planetas de aproximadamente el tamaño de la Tierra y están en zona habitable.
Pero los “planetas previamente descubiertos son más grandes que la Tierra, y consecuentemente su verdadera naturaleza —rocosa o gaseosa— es desconocida”, dijo SETI en un comunicado el jueves. “Sobre la base de la atenuación de la luz estelar observada de Kepler-186, los autores estiman que este recién descubierto planeta es casi del mismo tamaño de la Tierra”.
El planeta también está a la distancia suficiente de su estrella para evitar peligros a la posible vida, incluyendo llamaradas estelares emitidas por estrellas enanas.
Anticipándose al anuncio del jueves de la NASA, DailyGalaxy.com preguntó si Kepler-186f podría probar que hay un “gemelo de Tierra”.
“Kepler-186f probablemente es un planeta rocoso y en ese caso sería similar a Venus, la Tierra y Marte”, dijo Thomas Barclay de la misión Kepler de la NASA.
Incluso la mejor tecnología no es lo suficientemente potente para que los científicos puedan saber las características de la atmósfera del planeta en este punto. Pero el telescopio Webb —que estaría en el espacio—, ahora bajo construcción, podría reunir imágenes de planetas cercanos a estrellas enanas y estudiar sus atmósferas.
Para los investigadores, el descubrimiento de Kepler-186f es como un nuevo comienzo. Es un primer paso, “pero no un registro que queremos mantener”, dijo Quintana. “Queremos encontrar más”.
Probablemente lo harán. Astrónomos de la Universidad de California en Berkeley y de la Universidad de Hawái , usando datos de Kepler, estiman que decenas de miles de millones de planteas posiblemente habitables del tamaño de la Tierra existen en nuestra galaxia, la Vía Láctea.
Lo Publicado en el Periódico Español:
Sociedad
Descubiertos 32 nuevos planetas extrasolares
Los mundos conocidos alrededor de estrellas diferentes del Sol son ya más de 400.
A. RIVERA/ M. RUIZ DE ELVIRA - Madrid - 19/10/2009
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El astrónomo suizo Michel Mayor,
descubridor del primer planeta extrasolar,
en la conferencia que se celebra en la
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El suizo Michel Mayor, el astrónomo que descubrió, en 1995, el primer planeta en órbita de una estrella que no sea el Sol, ha anunciado en Madrid que su equipo ha descubierto otros 32, utilizando un detector avanzado que está instalado en un telescopio del observatorio de La Silla (Chile). Mayor ha hecho el anuncio en la conferencia Herederos de Galileo: las fronteras de la Astronomía, celebrada en la Fundación Ramón Areces, a la vez que su equipo lo hacía en el congreso Hacia otras tierras: perspectivas y limitaciones de la era del Telescopio Extremadamente grande (ELT), que se celebra en Oporto (Portugal). "En total ya se han encontrado más de 400 planetas extrasolares", ha destacado Mayor, "pero yo diría que lo más significativo es la gran diversidad de cuerpos que vamos encontrando, tan distintos de nuestro Sistema Solar".
La fotografía digital y los ordenadores defenestraron a Plutón como planeta, asegura Michael Brown
La fotografía digital y los avances en computación son los verdaderos artífices de la defenestración de Plutón como planeta, reconoció ayer Michael Brown en el mismo congreso. El descubrimiento por Brown del objeto Eris, mayor que Plutón, en 2005, fue la causa de que éste dejara de formar parte de la nómina de planetas en 2006. "Cuando fue descubierto Plutón, en 1930, no se conocía su tamaño y se le catalogó como planeta sin más, porque no se disponía de las técnicas actuales para buscar objetos parecidos más allá de Neptuno", recordó. "Hemos tenido que esperar 75 años a que la fotografía digital lo permitiese, pero son objetos muy interesantes porque cada uno de ellos contiene una pequeña parte, distinta, de la historia del Sistema Solar".
Respecto a los exoplanetas, el equipo de Mayor tiene asignadas 100 noches al año de observación con ese telescopio de espejo principal de 3,6 metros de diámetro, del Observatorio Europeo Austral (ESO), desde hace cinco años, y ya han encontrado 80 exoplanetas en 30 sistemas planetarios distintos, "incluidos 25 con masa no superior a 20 Tierras -el menor es sólo dos Tierras", ha explicado el astrónomo suizo. "Nuestra técnica ha mejorado mucho y sigue mejorando, de modo que creo que nos acercamos hacia la detección de algún cuerpo similar a nuestro planeta". Este grupo de científicos utiliza una técnica indirecta para encontrar planetas extrasolares observando, con gran detalle, las perturbaciones gravitatorias que la presencia de cuerpos en órbita generan en el movimiento del astro central. ¿Para cuando una buena foto de uno de estos cuerpos? "Hacen falta nuevos grandes telescopios en órbita o los enormes observatorios terrestres que se están diseñando", dice Mayor. "Pero podemos soñar.... si alguien observase nuestra Tierra desde lejos, como tiene continentes, vería variaciones en el color de la superficie a medida que el planeta gira. Tal vez algún día se pueda ver algo así en un planeta extrasolar, pero no sé cuándo".
Mayor ha destacado que sus investigaciones se centran ahora en la búsqueda de planetas situados a una distancia tal de su astro que pudieran ser habitables. "Necesitamos conocer planetas con condiciones de habitabilidad para estudiar con mas detalle las posibilidades de la vida en el universo", ha explicado. También están buscando cuerpos en torno a estrellas pequeñas y, por tanto, poco luminosas, así como exoplanetas de distinta composición. "Queremos comprender mejor el proceso de formación de nuestro sistema solar y de otros sistemas plantarios".
Brown, por su parte, ha explicado que dada la órbita excéntrica y muy grande de Eris, que tarda en recorrer 580 años, sólo se habría podido detectar desde la Tierra, por su relativa cercanía, hace 290 años. Entonces, si hubiera habido telescopios lo suficientemente avanzados para poder observarlo, habría brillado más que Plutón, que no fue descubierto hasta 1930, cuando Eris estaba mucho más alejado.
En la conferencia de Oporto, Nuno Santos ha precisado que de los 28 planetas descubiertos con masa inferior a 20 tierras, 24 se han encontrado con el detector de La Silla, denominado Buscador de Alta Precisión de Planeta por Velocidad Radial (HARPS, en sus siglas en inglés). Esos cuerpos se llaman supertierras o neptunos. "La mayoría de estos planetas de poca masa está en sistemas multiplanetarios, con hasta cinco cuerpos cada uno", ha explicado Santos. Los científicos están discutiendo en la ciudad portuguesa la nueva generación de instrumentos astronómicos y telescopios que se están diseñando ahora y que serán construidos por diferentes equipos de todo el mundo para descubrir otras Tierras. Prestan especial atención al futuro ELT, un telescopio terrestre gigante de 42 metros de diámetro.
Sistema Solar
De Wikipedia, la enciclopedia libre
wikipedia.org/wiki/Sistema_Solar
Esquema del Sistema Solar que incluye los planetas y planetas enanos. Los tamaños se encuentran a escala, las distancias entre los planetas y la ubicación no, debido a que una reproducción a escala es imposible por las distancias entre sí.
Sistema Solar y sus planetas orbitando alrededor del sol.
Está formado por una única estrella llamada Sol, que da nombre a este Sistema, más ocho planetas que orbitan alrededor de la estrella: Mercurio, Venus, Tierra, Marte, Júpiter, Saturno, Urano y Neptuno; más un conjunto de otros cuerpos menores: planetas enanos (Plutón, Eris, Makemake, Haumea y Ceres), asteroides, satélites naturales, cometas... así como el espacio interplanetario comprendido entre ellos.
Planetas
El 24 de agosto de 2006, en Praga, en la XXVI Asamblea General la Unión Astronómica Internacional (UAI), se excluyó a Plutón como planeta del Sistema Solar. Tras una larga controversia sobre esta resolución, se tomó la decisión por unanimidad. Con esto se reconoce el error de haber otorgado la categoría de planeta a Plutón en 1930, año de su descubrimiento. Desde ese día el Sistema Solar queda compuesto por 8 planetas.
Los 8 planetas que integran el Sistema Solar, de acuerdo con su cercanía al Sol, son: Mercurio, Venus, Tierra, Marte, Júpiter, Saturno, Urano y Neptuno. Y estos planetas son astros que giran de manera circular formando órbitas alrededor del Sol, tienen suficiente masa para que su gravedad supere las fuerzas del cuerpo rígido, de manera que asuman una forma en equilibrio hidrostático (prácticamente esférica) y han limpiado la vecindad de su órbita de planetesimales.
A Júpiter, Saturno, Urano y Neptuno los científicos los han denominado planetas gaseosos por contener en sus atmósferas gases como el helio, el hidrógeno y el metano, sin saber a ciencia cierta la estructura de su superficie.
La dimensión astronómica de las distancias en el espacio
Light Velocity - Se Ilustra cuanto se Tarda en llegar la luz de la Tierra a la Luna, visualmente
Para tener una noción de la dimensión astronómica de las distancias en el espacio, es interesante hacer un modelo a escala que permita tener una percepción más clara del mismo. Imagínese un modelo reducido en el que el Sol esté representado por una pelota de fútbol (de 220 mm de diámetro). A esa escala, la Tierra estaría a 23,6 m de distancia y sería una esfera con apenas 2 mm de diámetro (la Luna estaría a unos 5 cm de la tierra y tendría un diámetro de unos 0,5 mm) . Júpiter y Saturno serían bolitas con cerca de 2 cm de diámetro, a 123 y a 226 m del Sol respectivamente. Plutón estaría a 931 m del Sol, con cerca de 0,3 mm de diámetro. En cuanto la estrella más próxima (Próxima Centauri) estaría a 6.332 km del Sol, y la estrella Sirio a 13.150 km.
Si se tardase 1 h y cuarto en ir de la Tierra a la Luna (a unos 257.000 km/h), se tardaría unas 3 semanas (terrestres) en ir de la Tierra al Sol, unos 3 meses en ir a Júpiter, 7 meses a Saturno y unos 2 años y medio en llegar a Plutón y dejar nuestro Sistema Solar. A partir de ahí, a esa velocidad, tendríamos que esperar unos 17.600 años hasta llegar a la estrella más próxima, y 35.000 años hasta llegar a Sirio.
Una escala comparativa más exacta puede ser si comparamos el Sol con un disco compacto de 12 cm de diámetro. A esta escala, la Tierra tendría poco más de medio milímetro de diámetro (0,55 mm). El Sol estaría a 6,44 metros. El diámetro de la estrella más grande del Universo conocido, VY Canis Majoris, sería de 264 metros (imaginemos esa enorme estrella de casi tres manzanas de casas de tamaño comparado con nuestra estrella de 12 cm). La órbita externa de Eris se alejaría a 625.48 metros del sol. Allí nos espera un gran vacío hasta la estrella más cercana ,Proxima Centauri, a 1645,6 Km de distancia. A partir de allí las distancias galácticas exceden el tamaño de la Tierra (aún hablando en la misma escala). Con nuestro Sol del tamaño de un Disco Compacto, el centro de la galaxia estaría a casi 11 millones de kilómetros y el diámetro de la Via Láctea sería de casi 39 millones de kilómetros. Un enorme vacío nos espera porque la galaxia Andrómeda estaría a 1028 millones de kilómetros, casi la distancia al Sol de Saturno.
Reflexión Final
No hay duda de que el descubrimiento de estos nuevos Planetas, prueba que La Codificación Espirita ya había mencionado de una manera muy clara la existencia no solo de 32 sino de miles y millones de ellos en el Universo. No solamente se menciona la existencia de Planetas adicionales a los hoy conocidos y que han sido descubierto recientemente, sino que también puntualiza que son muchos más los que existen y no han sido descubiertos aún.
Nuestra filosofía ha probado ser fuera de toda duda, una que ha cumplido su razón de ser al dejarnos ver toda la información necesaria para nuestras comunicaciones espirituales. No es para menos que esto sea así, pues esto demuestra una vez más lo importante que somos para Dios la humanidad y una prueba más de la autenticidad de estos documentos de La Codificación Espirita.
Quiero finalmente compartir una psicografia dada a mi por espíritus superiores cuando publiqué un artículo sobre el Fluido Cósmico Universal recientemente:
“El Principio de todas las cosas ha sido Dios, inteligencia máxima y perfecta cuya grandeza se basa en el bien en todos los sentidos, el Amor y deseo del bien. El principio vital y fluidos universales que se comportan en la vida del mismo modo que el universo actuante, todo es relativo a las circunstancias que se tengan que ajustar, ahí estriba su inteligencia que procede de Dios de una manera dinámica. Dios está en todo y gobierna todos los movimientos existentes”
Psicografiado por Frank Montañez, 10/27/11, 2am
Sin lugar a dudas Dios es Dios y el esta en todo lo que existe, hasta en el mínimo movimiento existente de todo lo que existe en nuestro mundo físico, tanto en todo el Universo como en el mundo espiritual. !Que no lo podamos entender, no significa que Dios no exista! Pues somos aún seres imperfectos en el proceso evolutivo de los Espíritus, y ni millones de cerebros inteligentes contenidos en las mas sofisticadas computadoras modernas, pueden entender aún la naturaleza de Dios, pues aun luchan por entender el origen del Universo y la vida y no pueden explicarlo. Ni aún los espíritus que están en la Erraticidad y no han alcanzado la pureza y la perfección espiritual pueden explicarlo.
Los Espíritus nos alertaron que había cosas que no podíamos entender pero que lo entenderíamos en el futuro:
Significando esto que lo pudiéramos entender todo en esta existencia no era posible, pues no somos perfectos, sí; estamos en un proceso evolutivo, y cuando sea el momento que hayamos alcanzado la perfección espiritual a lo cual todos queremos llegar, tendremos acceso a todo el conocimiento de Dios que no ha sido revelado aún.
Esperamos haber presentado lo más claro posible esta reflexión que contribuye con nuestra responsabilidad de educar.
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