Los participantes del XXI Congreso Espírita Panamericano de
CEPA, que tuvo como tema central “Perspectivas Contemporáneas de la Teoría
Espírita de la Reencarnación”, realizado en la ciudad de Santos, São Paulo,
Brasil, del 5 al 9 de septiembre de 2012, emiten la presente Declaración, a
partir de propuestas, ideas y conceptos expuestos y debatidos en el referido
evento:
Los participantes del XXI
Congreso Espírita Panamericano de CEPA, que tuvo como tema central
“Perspectivas Contemporáneas de la Teoría Espírita de la
Reencarnación”, realizado en la ciudad de Santos, São
Paulo, Brasil, del 5 al 9 de septiembre de 2012, emiten la presente
Declaración, a partir de propuestas, ideas y conceptos expuestos y debatidos en
el referido evento:
1.
Las estadísticas
demuestran que la creencia en la reencarnación o su aceptación como hipótesis
científico-filosófica gana expansión en todos los continentes,
independientemente de las tradiciones culturales y religiosas de sus
respectivos pueblos y naciones.
2.
Episodios cada vez más
frecuentes de recuerdos espontáneos de probables vidas pasadas, especialmente
en niños, así como el uso de la hipnosis regresiva y
experiencias mediúmnicas que acceden a presuntas vidas anteriores de
la actual existencia física, ofrecen hoy un rico manantial de estudios aptos
para fortalecer de forma fáctica la teoría reencarnacionista.
3.
La aceptación de la
hipótesis palingenésica, especialmente a partir de la perspectiva racional y
filosófica, apoyada en indicios y/o evidencias que se verifican en el campo de
la ciencia experimental, vienen al encuentro de las propuestas fundamentales del Espiritismo,
enunciadas en las obras básicas de Allan Kardec y en obras complementarias de
filósofos, científicos, estudiosos, escritores y pensadores que, después de él,
vienen desarrollando una teoría espírita con una perspectiva progresista, laica y
librepensadora.
4.
Como resultado de esta seria y fecunda labor, es posible,
en el presente estadio cultural de la humanidad, presentar la teoría reencarnacionista espírita
como un nuevo paradigma filosófico y científico que merece la valoración, el estudio, la profundización de la investigación y la
aplicación práctica en todas las áreas del conocimiento y del hacer humano.
5.
Para que la teoría espírita
de la reencarnación pueda, efectivamente, ser asimilada como un nuevo paradigma
filosófico y científico, entretanto, será necesario ofrecerlo a la cultura
humana, no como un dogma religioso, sino como un conocimiento capaz de dotar al
individuo y a la sociedad de responsabilidad personal y colectiva sobre el
progreso individual y social.
6.
Resáltese que, a partir
de la visión genuinamente espírita, la reencarnación no es un fin en sí misma.
Al contrario, es un medio idóneo, necesario, insustituible, incluido en un
proceso multifacético, dinámico, ya que es parte integrante de los mecanismos
de la evolución, principio científico consagrado por la modernidad;
7.
A la luz de la filosofía
espírita, la rencarnación puede ser vista como un
poderoso instrumento de búsqueda de la justicia social, reduciendo,
progresivamente, las desigualdades y las injusticias sociales. Éstas, jamás deben ser interpretadas como consecuencias de una presunta
voluntad divina, sino como resultado del orgullo, del egoísmo
y del menosprecio de las leyes naturales. La propuesta ética espírita combate
estos vicios humanos y contribuye con la construcción de una sociedad más justa
y solidaria.
8.
A diferencia de antiguas
creencias, como la metempsicosis, o de algunas concepciones todavía vigentes en
doctrinas reencarnacionistas que se dicen inspiradas en el cristianismo, en el
hinduismo o en otras concepciones religiosas del mundo actual, la palingenesia espírita
defiende que el espíritu reencarna para progresar y no para pagar culpas. Por esto, la visión reencarnacionista espírita es esencialmente
pedagógica, ejerciendo un importante rol en la progresiva educación del
espíritu inmortal.
9.
Plenamente identificados
con las propuestas contemporáneas de preservación de los recursos naturales
indispensables para la vida saludable presente y futura, los espíritas deben
promover constantes esfuerzos en pro de una teoría espírita reencarnacionista
sustentable, capaz de contribuir a la concientización de la Humanidad en el
sentido de evitar el consumismo excesivo y la falsa prosperidad.
10.
La visión palingenésica espírita,
en fin, libera al espíritu del dogmatismo religioso y de cualquier postura
sectaria. Construidas a partir de las propuestas contenidas en la obra de
Allan Kardec y de sus interlocutores espirituales, y permanentemente
perfeccionable por la contribución progresista y librepensadora que resulta del
intercambio entre la Humanidad encarnada y desencarnada, es, al entender de los
espíritas aquí reunidos, eficiente instrumento de autoconocimiento, de
educación y de progreso ético individual y colectivo. Identificada con las
leyes naturales, especialmente con los valores de Justicia, Amor y Caridad, que
la sintetiza, la reencarnación, tal como fue sistematizada en la teoría
espírita, contiene, de esta forma, elementos de convicción científica,
filosófica y ética de carácter universal. Gracias a su visión
reencarnacionista, basada en la evolución y el progreso, puede el espiritismo
ofrecer a la humanidad, en este momento histórico, un nuevo paradigma capaz de
acercar culturas y hermanar pueblos, en favor del Progreso, la Paz y la
Fraternidad.