Los Espiritistas Verdaderos decimos sí a ls vida y no al Aborto. Decimos "NO al ABORTO", pero el Papa Francisco sin ser Dios, perdona el aborto a los que hayan cometido ese crimem ante Dios.
Publicado 1st September 2015 por Frank Montañez
El aborto es un acto despreciable, dónde se le priva a la vida a un Espíritu antes de nacer. Es un crimen ante DIOS que no se puede absolver por una orden papal, eso es creerse dueño de la vida, eso es querer ser Dios. Ésto demuestra un gran deterioro Moral en los Espiritualistas Cristianos, y en la iglesia católica.Así fue parte del texto de una carta enviada a los que han cometido aborto...
Así dijo el Papa Francisco:
"He decidido conceder a todos los sacerdotes para el Año jubilar la facultad de absolver del pecado del aborto a quienes lo han practicado y arrepentidos de corazón piden por ello perdón"
En éste artículo comienzo con lo que expone
el Espiritismo en esta barbaridad espiritual expresada por el Papa Francisco,
líder máximo de la Cristiandad, para dejar en claro que el aborto es un Crimen
ante Dios y luego presentare esta impactante mala noticia para el mundo
civilizado ya que esto demuestra un gran deterioro Moral en la Cristiandad que
serán derrumbados por las ideas progresivas de nuestro tiempo, anunciada
por los Espíritus en los Libros Codificados. (“Un
solo rebaño y un solopastor”)
El Espiritismo a través de los Espíritus
Puros y Perfectos, ya habían indicado que el aborto es un crimen, que solo
puede ser expiado a través de reparar esa prueba, pagando por ese mal
comportamiento y el dolor que se ocasionó, en nuevas existencias.
"Nadie puede absolver un crimen de
esta naturaleza. El papa no es Dios, para que pueda ordenar que el crimen del
aborto, pueda ser condonado o perdonado."
Lo que debería hacer es indicar que eso no
debe nunca perpetrarse y arrepentirse, y no incentivar a que ese crimen la
iglesia lo perdona. Esto es una barbaridad espiritual, que tenía que verse para
que los religiosos fueran descubiertos con este jueguito de querer ser
dioses.
Ni la religiosidad ni la cristiandad,
representada por un hombre, que no es Dios, pueda tener lugar. ¿Y dónde está la
Moral? “No le hagas a otro lo que no te gustaría te hagan a ti? ¿Dónde está el
mensaje de Jesús de Nazareth?
Es por estas MALAS enseñanzas, que las
iglesias cristianas, están desapareciendo, porque las ideas progresivas,
destruirán la inmutabilidad de la religiones.
El Libro de los Espíritus, dice y cito
textualmente:
357. ¿Cuáles son, para el Espíritu,
las consecuencias del aborto?
“Una existencia nula, que tendrá que
recomenzar.”
358. El aborto provocado, ¿es un
crimen, sea cual fuere el período de la gestación en que se lo realice?
“Siempre se comete un crimen desde el
momento en que transgredís la ley de Dios. La madre, u otra persona, siempre
comete un crimen al quitarle la vida al niño antes de que nazca, porque le
impide al alma afrontar las pruebas cuyo instrumento debía ser el cuerpo.”
359. En los casos en que la vida de la
madre corre peligro si el niño nace, ¿es un crimen sacrificar al niño para
salvar a la madre?
“Es preferible sacrificar al ser que no
existe, antes que al que existe.”
360. ¿Es racional dispensarle al feto
la misma consideración que al cuerpo de un niño que ha vivido?
“Ved en todo esto la voluntad de Dios y su
obra. Así pues, no tratéis con ligereza las cosas que debéis respetar. ¿Por qué
no habría que respetar las obras de la creación que a veces quedan incompletas
por voluntad del Creador? Eso forma parte de sus designios, que nadie ha sido
llamado a juzgar.”
Veamos el parte de prensa anunciando que el
Papa autoriza el aborto.
El papa Francisco permitirá que los sacerdotes absuelvan el "pecado del aborto" durante el Jubileo
La
absolución será concedida a "quienes lo han practicado y que estén
arrepentidos de corazón" durante el Año Santo extraordinario, que
comenzará el próximo 8 de diciembre
Creditos de esta noticia.
CIUDAD DEL VATICANO.- El papa Francisco
concedió hoy a los sacerdotes que absuelvan "el pecado de aborto a
quienes lo han practicado y que estén arrepentidos de corazón", durante
el Jubileo de la Misericordia que comienza el próximo 8 de diciembre y
se celebrara hasta el 20 de noviembre de 2016, en un nuevo paso del
pontífice argentino hacia una iglesia más abierta e integradora.
La
decisión se lee en una carta enviada al presidente del Pontificio
Consejo para la promoción de la Nueva Evangelización, Rino Fisichella, y
encargado de organizar el Año Santo extraordinario convocado por el
pontífice y publicada hoy por la oficina de prensa del Vaticano.
Según
la doctrina católica, el aborto es un pecado tan grave que quienes lo
facilitan o lo realizan incurren en la excomunión automática y un
sacerdote sólo lo puede absolver por orden de un obispo o del pontífice.
"El
perdón de Dios no se puede negar a todo el que se haya arrepentido".
Con esta premisa Francisco explica la decisión de conceder a los
sacerdotes que absuelvan pecados considerados graves por la Iglesia
católica.
"He decidido conceder a
todos los sacerdotes para el Año jubilar la facultad de absolver del
pecado del aborto a quienes lo han practicado y arrepentidos de corazón
piden por ello perdón"
"También
por este motivo he decidido conceder a todos los sacerdotes para el Año
jubilar, no obstante cualquier cuestión contraria, la facultad de
absolver del pecado del aborto a quienes lo han practicado y
arrepentidos de corazón piden por ello perdón", reconoce el Papa en su
misiva.
Francisco afirma que "uno de los graves problemas de
nuestro tiempo es, ciertamente, la modificación de la relación con la
vida" y que "algunos viven el drama del aborto con una consciencia
superficial, casi sin darse cuenta del gravísimo mal que comporta un
acto de ese tipo".
Pero muchos otros, en cambio, agrega Francisco,
"incluso viviendo ese momento como una derrota, consideran no tener
otro camino por donde ir".
"Pienso, de forma especial, en todas
las mujeres que han recurrido al aborto. Conozco bien los
condicionamientos que las condujeron a esa decisión", escribe Francisco.
La
carta continúa: "Sé que es un drama existencial y moral. He encontrado a
muchas mujeres que llevaban en su corazón una cicatriz por esa elección
sufrida y dolorosa. Lo sucedido es profundamente injusto; sin embargo,
sólo el hecho de comprenderlo en su verdad puede consentir no perder la
esperanza".
"Sé que es un drama
existencial y moral. He encontrado a muchas mujeres que llevaban en su
corazón una cicatriz por esa elección sufrida y dolorosa"
Francisco
indica entonces a los sacerdotes que "se deben preparar para esta gran
tarea sabiendo conjugar palabras de genuina acogida con una reflexión
que ayude a comprender el pecado cometido, e indicar un itinerario de
conversión".
En la bula (documento) en el que el Papa
convocaba el Jubileo ya se incluía que una de las novedades serían los
llamados "Misioneros de la Misericordia", sacerdotes enviados por
Francisco para predicar y confesar también los llamados "pecados
reservados a la sede apostólica", entre ellos el aborto.
Con esta carta, Francisco -que ha rechazado el aborto sistemáticamente-
explica con todo detalle y da instrucciones sobre cómo obtener la
indulgencia plenaria durante este Año Santo dedicado a la Misericordia.
"Para
vivir y obtener la indulgencia los fieles están llamados a realizar una
breve peregrinación hacia la Puerta Santa, abierta en cada catedral o
en las iglesias establecidas por el obispo diocesano y en las cuatro
basílicas papales en Roma, como signo del deseo profundo de auténtica
conversión", agrega Jorge Bergoglio.
Además, añade que se "se
pueda ganar la indulgencia en los santuarios donde se abra la Puerta de
la Misericordia y en las iglesias que tradicionalmente se identifican
como Jubilares".
Indulgencia para los presos
El
Papa también recuerda que la celebración de un Jubileo siempre ha sido
la ocasión de una "gran amnistía" para los presos, "que aunque
mereciendo una pena, sin embargo han tomado conciencia de la injusticia
cometida y desean sinceramente integrarse de nuevo en la sociedad".
Y además concede que los presos "en las capillas de las cárceles podrán ganar la indulgencia".
"Cada
vez que atraviesen la puerta de su celda, dirigiendo su pensamiento y
la oración al Padre, pueda este gesto ser para ellos el paso de la
Puerta Santa", escribió.
El organizador del Jubileo, Rino
Fisichella, ha señalado que "Francisco, desde siempre, ha querido
destacar que el Jubileo extraordinario podrá ser vivido en Roma, pero
también en las diferentes diócesis".
Por ello, Francisco destacó
que para recibir la indulgencia (el perdón de los pecados) los fieles
están llamados a realizar una breve peregrinación hacia la Puerta Santa
de San Pedro y de las cuatro basílicas romanas, pero también "en la
catedral o en las iglesias establecidas por el obispo diocesano".
A
quienes por diversos motivos se vean imposibilitados de llegar a la
Puerta Santa, como enfermos y las personas ancianas y solas, "también a
través de los diversos medios de comunicación".
Otra de las
sorpresas de este Jubileo es que Francisco también concede que puedan
dar el perdón de los pecados los sacerdotes de la Fraternidad de San Pío
X, los llamados lefebvrianos.
Y desea "que se puedan encontrar
soluciones para recuperar la plena comunión con los sacerdotes y los
superiores de la Fraternidad", que no reconoce las novedades
introducidas en el Concilio Vaticano II, lo que desató en 1988 un cisma
en la Iglesia católica.
Ya los tiempos en que
se decían cosas sin lógica y
razón pasaran por alto los valores Morales, sostenidos por el
mensaje de Jesús a la humanidad.
Ya es tiempo que sean claramente
identificados a los que se creen dioses y han engañado por siglos a los seres
humanos.
Ya es tiempo de que te pongas a pensar en
quien has creído. Porque esta postura, al aceptarla, te haces cómplice de
la matanza de niños inocentes, antes de nacer.
¿Cómo quedarse callado ante esta
barbaridad? Yo no soy cómplice de ese error y de esos crímenes cometidos y los
que han de cometerse a raíz de esta posición errónea de los cristianos.
Nadie es dueño de la vida de los demás, basta ya de tanto crimen...
“Un solo rebaño y un solo pastor”.
La Génesis - Capítulo XVII, en las Predicciones del Evangelio,
#31. “También tengo otras ovejas, que no son de este redil; también a esas las tengo que conducir; ellas escucharán mi voz, y habrá un solo rebaño y un solo pastor.” (San Juan, 10:16).
#32. Con esas palabras, Jesús anuncia claramente que los hombres se unirán un día mediante una única creencia; pero ¿cómo se podrá llevar a cabo esa unión? La tarea parece difícil, si se toman en cuenta las diferencias que existen entre las religiones los antagonismos que estas alimentan entre sus respectivos adeptos, así como la obstinación que manifiestan en considerarse con la exclusiva posesión de la verdad.
Todas aspiran a la unidad, pero cada una se vanagloria de que esa unidad se concretará para su beneficio, y ninguna admite la posibilidad de hacer alguna concesión a sus creencias. Sin embargo, la unidad en cuanto a la religión se logrará, así como ya tiende a realizarse en lo social, lo político y lo comercial, mediante la desaparición de las barreras que separan a los pueblos, a través de la asimilación de las costumbres, de los hábitos, del lenguaje. Los pueblos del mundo entero confraternizan ahora del mismo modo que los de las provincias de un mismo país. Se presiente esa unidad, y todos la anhelan. Se logrará por la fuerza de las circunstancias, porque llegará a ser una necesidad para que se estrechen los lazos fraternales entre las naciones; se logrará a través del desarrollo de la razón humana, que estará apta para comprender la puerilidad de las disidencias; por el progreso de las ciencias, que demostrará día a día los errores materiales sobre los cuales esas disidencias se apoyan, y que reemplazarán las piedras carcomidas que hay en sus cimientos. Así como es cierto que, en las religiones, la ciencia echa por tierra aquello que es obra de los hombres, y fruto de su ignorancia respecto de las leyes de la naturaleza, también es cierto que, pese a la opinión de algunos, no puede destruir la verdad eterna que es obra de Dios. Al apartar lo secundario, prepara los caminos que conducen a la unidad. A fin de llegar a la unidad, las religiones tendrán que congregarse en un terreno neutral, aunque común a todas.
En ese sentido, todas deberán realizar concesiones y sacrificios, de mayor o menor importancia, de acuerdo con sus múltiples dogmas particulares. No obstante, en virtud del principio de inmutabilidad, que todas profesan, la iniciativa de las concesiones no podrá partir del campo oficial; en vez de que el punto de partida se tome desde lo alto, lo tomará desde abajo la iniciativa individual. De un tiempo a esta parte se está gestando un movimiento de descentralización que tiende a adquirir una fuerza irresistible.
El principio de la inmutabilidad, que ha servido como escudo a las religiones conservadoras, habrá de transformarse en un elemento destructor, pues si los cultos religiosos permanecen en la inmovilidad, mientras la sociedad avanza, se verán superados y posteriormente absorbidos por la corriente de las ideas progresivas.
La inmovilidad, en vez de ser una fuerza, se convierte en una causa de debilidad y de ruina para quien no acompaña el movimiento general. Además, destruye la unidad, pues quienes desean avanzar se apartan de los que se obstinan en quedarse rezagados. En el estado actual de la opinión y de los conocimientos, la religión llamada a congregar un día a todos los hombres bajo un mismo estandarte, será la que mejor satisfaga a la razón y a las legítimas aspiraciones del corazón y del espíritu; la que no sea en ningún punto desmentida por la ciencia positiva; la que en vez de inmovilizarse acompañe a la humanidad en su marcha progresiva, sin dejarse aventajar; la que no sea exclusiva ni intolerante, sino emancipadora de la inteligencia, admitiendo sólo la fe racional; aquella cuyo código de moral sea el más puro, el más racional, el que esté más en armonía con las necesidades sociales, el más apropiado, en fin, para fundar en la Tierra el reinado del bien, con la práctica de la caridad y la fraternidad universales.
Lo que alimenta el antagonismo entre las religiones es la idea de que cada una tiene su dios particular, y la pretensión de que ese dios es el único verdadero y el más poderoso, en constante lucha con los dioses de los demás cultos, y ocupado en combatir su influencia.
Cuando se hayan convencido de que sólo existe un Dios en el universo y que, en definitiva, Él es el mismo que ellas adoran con los nombres de Jehová, Alá o Dios; cuando se pongan de acuerdo sobre los atributos esenciales de la divinidad, comprenderán que un ser único no puede tener más que una sola voluntad; entonces se tenderán las manos unas con otras, como los servidores de un mismo Maestro y los hijos de un mismo Padre, con lo cual habrán dado un gran paso hacia la unidad.
Mas claro, no canta el gallo....